Gestion y administración de organizaciones deportivas – Rubén Acosta Hernández En los países enormemente desarrollados pocas son las organizacio­nes deportivas nacionales que están suficientemente estructuradas para hacer en frente de los retos que representa un entorno de­portivo profesional bajo la repercusión de las estrellas del deporte, los promotores, las cadenas televisivas y los periódicos; cada uno de ellos de és­tos procura por su parte tomar el control de las actividades promocionales y mercantiles de los acontecimientos deportivos de mayor relevancia. En nuestros días, la mayor parte de las organizaciones deportivas son dirigi­das, entre otros muchos, por técnicos, profesores de escuela, instructores de educación física y apasionados al deporte. Generalmente, esta gente es siendo consciente de que la práctica sistemática del deporte puede benefi­ciar al individuo y la comunidad en conjunto, mas con frecuencia pasa por alto su relevancia para quienes desean lograr un elevado nivel de desempeño deportivo, desarrollar habilidades atléticas y técnicas depor­tivas, adquirir experiencia competitiva y aprender de sus fra­casos y malas actuaciones deportivas. Además de esto, estos líderes tienen poca o bien ninguna experiencia en la concepción y el desarrollo de planes enfocados a la promoción de acontecimientos deportivos enormemente compe­titivos para el asentimiento, tanto de los apasionados al deporte, como de los medios, patrocinadores y espectadores. Poquísimas organizaciones deportivas nacionales en el planeta, así sean multideportivas o bien de un deporte concreto, han definido con claridad su papel o bien han identificado de forma precisa su imagen y sus objetivos. Dichas organizaciones no han establecido sin ambigüeda­des su programa de actividades para optimar su eficiencia, tanto indi­vidual como colectiva, en un tiempo determinado. La ineficacia de las organizaciones deportivas actuales se debe en una gran parte a la carencia de una visión impulsora y a la falta de una fuerza motriz basada en las capacidades administrativas, únicos elementos que pueden ase­gurar que los inconvenientes del deporte sean confrontados en el sitio y el instante oportunos con gente capacitada, enormemente motivada y bien organizada. Cualquier organización deportiva deSeosa de cumplir su misión y regular de manera exitosa las actividades cada día de su deporte debe prosperar las condiciones laborales de sus empleados, voluntarios y miembros, facilitar la participación masiva en su deporte, asegurar la disponibili­dad de material deportivo de alta tecnología y crear las condiciones apropiadas para la organización de acontecimientos deportivos que aseguren mayor competitividad para sus atletas, más entretenimiento para los espectadores, mayor interés para los medios y más satisfacciones para los patrocinadores. No obstante, la organización solo puede asu­mir estas responsabilidades siempre que haya conseguido una orga­nización conveniente, una administración eficiente y una administración profe­sional. : AgradecimientosPrefacio PARTE I: EL MUNDO DE LAS ORGANIZACIONES DEPORTIVASCapítulo 1. El contexto social del deporte modernoCapítulo dos. Una organización deportiva exitosaPARTE II: EL CAMINO DEL ÉXITOCapítulo tres. El poder del rendimientoCapítulo cuatro. De qué manera vender el deporte a la comunidadPARTE III: LAS PERSONAS QUE ABREN CAMINOCapítulo cinco. De qué forma actúa el gerente de deportesCapítulo seis. De qué forma planear el trabajo de su organizaciónCapítulo siete. De qué forma supervisar su organización GlosarioBibliografíaÍndice alfabético