El Jardinero Nocturno George Pelecanos

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El Jardinero Nocturno George Pelecanos A los apasionados a las buenas series probablemente les suene el nombre de George Pelecanos por ser uno de los argumentistas de las magistrales The Wire y Tiembla, las dos creadas por David Simon. Menos famosa en este país es su faceta como prosista, si bien lleva ya bastantes años siendo uno de los grandes del género policiaco de Norteamérica. De los mejores ejemplos de la narrativa de Pelecanos, y de los más identificables para los seguidores de The Wire, es El jardinero nocturno (The Night Gardener, dos mil seis), una estupenda novela en la que la trama primordial (la investigación policial de la muerte de un adolescente negro, cuyas peculiaridades recuerdan a una serie de crímenes ocurridos múltiples años atrás) convive con otras historias sobre el tráfico de drogas y la violencia rutinaria en las calles de Washington, la discriminación racial en los institutos, la corrupción policial y un largo etc., en las que los rebosantes personajes van repartiéndose el estrellato y cuya estructura de escenas paralelas recuerda a la de las series. La obsesión por el detalle, tanto en la descripción de los entornos como en todo lo que caracteriza a los personajes y la clase social a la que pertenecen (lo que comen, la música que escuchan, las marcas que visten); la crítica nada enmascarada dirigida cara los estamentos de la sociedad americana y, lo más esencial, una pasmosa capacidad para redactar diálogos recordables son ciertas señas de este espléndido prosista