Tesis. Vinculación cariñosa en pequeños con síndrome de Down El estudio de los vínculos cariñosos en la niñez no es un tema reciente; en este sentido son ya prácticamente más de 4 décadas dedicadas a la investigación de este campo del desarrollo infantil. Desde finales de la década de los sesenta del pasado siglo hasta nuestros días se han ido amontonando patentizas que nos llevan a conocer tanto los antecedentes de una relación de apego segura como las consecuencias que las calidades de los vínculos cariñosos tempranos tienen sobre el desarrollo del pequeño a corto, medio y largo plazo. Sin embargo, el estudio de los vínculos cariñosos en poblaciones infantiles con discapacidad, concretamente en pequeños con Síndrome de Down (de ahora en adelante SD) son más escasas. Desde la perspectiva del desarrollo psicomotor son bastante conocidas las consecuencias que esta trisomía ejercita sobre áreas como la cognición, el lenguaje, o bien la físicomotora, limitando, en diferentes grados, las competencias del pequeño y su capacidad de adaptación a las demandas del ambiente. Si a estas restricciones se agrega la que podría proceder del establecimiento de un apego inseguro entre el pequeño con SD y sus cuidadores primordiales, las implicaciones negativas que se podrían causar sobre el desarrollo serían de mayor magnitud. O sea, si se acepta que el establecimiento de un apego seguro es vital para favorecer el desarrollo de cualquier pequeño, cuánto más lo va a ser en una población con discapacidad, como la que es objeto de esta investigación, por presentar una serie de factores, tanto orgánicos como intelectuales, considerados de peligro y que pueden complicar la interacción positiva con el cuidador primordial. Todo puede representar una menor frecuencia de conductas exploratorias y con esto, una afectación mayor en el desarrollo cognitivo, motor o bien en la interacción social