La Nueva República vive una era de calma. La reconstrucción de Coruscant, desvastada por los poderes del Emperador resucitado, prácticamente ha llegado a su fin; y los desperdigados restos del Imperio, derrotados una y otra vez, han buscado cobijo en las oscuras profundidades del Núcleo. Día tras día que pasa, nuevos mundos presentan su petición de ingreso en la Nueva República, atraídos por los ideales de libertad, justicia y también igualdad que los viejos rebeldes han transformado en la nueva bandera de su gobierno galáctico. Además de esto, por vez primera desde la derrota del Imperio, la Nueva República ha edificado un poderío militar lo suficiente grande para poder sentirse segura y disuadir a sus ocasionales oponentes de cualquier idea de atacarla: la Quinta Flota, recién salida de los astilleros, defenderá los ideales de solidaridad y también independencia en cualquier límite de la galaxia. Mas la paz, con su nuevo énfasis en la rutina rutinaria y los pequeños inconvenientes de día a día, asimismo tiene sus aspectos desapacibles. La guerra hizo que todos olvidasen sus dudas y también inquietudes personales en interés del gran objetivo común de derrotar al Imperio, mas una vez alcanzada esa meta, los héroes de la Rebelión comienzan a descubrir que el futuro prosigue lleno de retos. Luke, que jamás ha logrado librarse de los espectros del pasado y que prosigue sin hallar la paz interior, ve surgir una ocasión de descubrir al fin qué fue de su madre. Cuando ya había decidido distanciarse de todo para transformarse en un ermitaño, la visitas de una nisteriosa joven llamada Akanah le revela que su madre era una fallanassi y que tal vez prosiga con vida. Luke, acompañado por Akanah, decide emprender una peligrosa peregrinación en pos de los secretos del pasado y de ese misterioso pueblo que conocía y dominaba los secretos de la Corriente. Y Leia, que prosigue combatiendo con los mil obstáculos gubernativos de cada instante, recibe otra visita: Nil Spaar, el virrey de la poderosa Liga de Duskhan, ha venido a Coruscant para entablar negociaciones con la Nueva República en representación de los planeta yevethanos que forman la Liga. Las negociaciones, que al comienzo semejan no ser sino más bien otro de los escollos diplomáticos de costumbre, no van a tardar en adquirir un viso poco a poco más lúgubre y amenazador conforme Nil Spaar vaya revelando su cara oculta y la de su especie. Los yevethanos son orgullosos, soberbios y xenófobos, y están resueltos a no compartir lo que consideran su legítemo territorio, el Cúmulo de Koornacht, con ninguna otra raza de seres inteligentes. Leia, Han y la Nueva República no van a tardar en verse atrapados en una compleja trama de traiciones y amenazas, considerablemente más horrible que cualquiera de las conspiraciones del Imperio. Sin la ayuda de Luke y sin poder contar con su viejo amigo Lando, que ha emprendido una peligrosa misión segrega en el espacio profundo, Han, Leia y la Nueva República se encaran a un nuevo y también ininteligible horror