Certamen literario para el estudiantado “Ana Mª Aparicio Pardo relatos premiados” El cuento es el género literario primigenio, el más espontáneo y natural, trasmitido oralmente generación tras generación durante los siglos. El cuento. Literatura libre, fresca, sin reglas, convencionalismos o bien ataduras. El cazador o bien la chica sorprendiendo a la tribu en interior de la caverna, aun ideando palabras nuevas que el clan debió adoptar desde ese momento, pues el lenguaje nacía en aquellos tiempos y había mucho que contar. Cuentos empapados de sabiduría que se contaban en el Ágora de la ciudad de Atenas. Cuentos al lado de las hogueras encendidas por las legiones de César. Cuentos sagrados de un joven y sabio rabino a riberas del Mar de Galilea (que alguien les dio el nombre de parábolas). Cuentos de juglares en una plaza de Toledo o bien de Hita allí por la Edad Media. Cuentos en los desiertos de Arabia, referidos a lo largo de una mágica noche que equivalió a mil y una de nuestras noches. Cuentos que un faquir de la ciudad de Calcula dedicó a la Luna Nueva. Desvariados cuentos en la inmensidad de la Biblioteca de la ciudad de Buenos Aires, donde un hombre imaginó mundos tan fascinantes como solo podría verlos un ciego. La madre que duerme a su hijo contándole las aventuras de Pulgarcito o bien las penalidades de Cenicienta. Palabras, palabras, palabras, afirmó Hamlet. Cuentos. Solamente que cuentos. Nada menos que cuentos. El Certamen “Ana María Aparicio” nació para rendir un sentido homenaje de cariño y respeto a una enorme maestra de manera temprana fallecida. No puede imaginarse mejor homenaje a quien dedicó su vida a la docencia que premiar en su nombre la inventiva de los jóvenes y promover la escritura de pequeñas grandes historias. Muy, muy grandes pese a su brevedad, como va a tener ocasión de revisar el prudente lector cuando lea los relatos ganadores, compendiados en ese volumen donde se recogen los cuentos de múltiples ediciones del certamen. La mayor parte son obras creadas por jóvenes, por adolescentes, quizá las voces más libres y genuinas de todas y cada una en el momento de reunir palabras para contar. Cuentos. Fabulosos o bien realistas. Románticos. De vampiros o bien de ciencia ficción. Que tratan de los horrores de la guerra y la debilidad de los derechos humanos. Narraciones detectivescas, de aventuras o bien de entorno rutinario