El mar. Bello y atroz, plácido y traicionero, el mar forma el telón de fondo que enmarca esta novela, cuya acción transcurre bajo el caluroso cielo de Jamaica. James Jones no se restringe a una pura novela de aventuras vibrantes o bien exóticas, sino ahonda en las ánimas de sus protagonistas, con toda la carga de sus pequeños y grandes problemas: la sofocación, la soledad, la busca de la propia consciencia, el miedo, los celos, etcétera Simultáneamente, plantea una inexorable crítica social al hacernos vivir la sofocación por la libertad del individuo en pelea con las presiones sociales. La obra reúne de este modo las peculiaridades primordiales de la narrativa norteamericana: lenguaje directo, veloz, jovial, en ocasiones brutal, sin demasiada preparación del estilo, en interés de la expresividad, del análisis psicológico y de la crítica social. El protagonista, Ron Grant, autor teatral conocido, aún joven, decide romper tajantamente con su pasado. Para esto abandona su fama y el amor emponzoñado de Carol Abernathy y se lanza a un peligro que puede parecer inútil: se empieza en la caza submarina de tiburones, con el único fin de volverse a descubrir, de probarse a sí mismo. El riesgo le va a dar la genuina medida de su valor. Carol Abernathy y Lucky son los otros 2 vértices del triángulo. La primera ha sido a lo largo de 14 años la amante para el resto una suerte de "segunda madre" de Ron, para encarnar ahora el papel de una mujer madura, insatisfecha con su destino, con un recio sentido de la moralidad, que la lleva a los actos más absurdos y a los celos más obsesivos. Asistió en un comienzo a Ron y pretende encadenarlo para toda la vida, a través de la tortura sicológica: creándole complejos. Lucky, bella, joven, inteligente, se cruza en el camino de Ron Grant en un instante de vital relevancia para él. Desde este momento la servirá de estímulo para lograr su meta. James Jones, nuevamente, ha vuelto a proponernos el tema clave de sus obras: el hombre en enfrentamiento consigo, el hombre que se lanza al peligro gratis, con la única finalidad de encontrarse a sí mismo