Nave: un vehículo interestelar, una Nave Profunda, enorme y en incesante desarrollo, consciente merced a un experimento olvidado hace bastante tiempo. Dentro de ella, los colonos: humanos y clones, que no saben nada de sus orígenes y para quienes Nave es Dios, un dios receloso al que hay que veNaverar o bien va a poner fin de forma terminante a la experiencia de la humanidad. Mas ¿quién sabe cono veNaverar? La nave vira en órbita en torno a Pandora, un planeta hostil lleno de formas de vida hostiles. Y uno de los clones, Morgan Oakes, cree tener una solución al dilema: conquistar Pandora. Multiplicar los clones amoldados a este planeta, y sacrificarlos sin piedad para edificar una fortaleza inconquistable lugar desde el que retar a Nave, y quizá aun destruirla. Mas entonces Nave saca de su hibernación a Raja Lon Flattery, que fue testigo de su despertar. Y Flattery quiere salvar la humanidad, contra Oakes y contra Nave. Ayudado por Panille el versista, por Hali la tecmed, a la que Nave ha hecho vivir un evento antiquísimo ocurrido en el monte Gólgota, y por Waela, que sabe que en el océano de Pandora vive un ser enorme y benevolente, el varec, Flattery cree poder lograrlo. Si Nave lo deja & En la novela se desarrollan 3 razonamientos paralelos: la nave y su pseudodivinidad; el intento de colonización del planeta; y la existencia de una entidad sintiente en él, el varec, que son unas algas que, como se prueba al final de este libro, forma una sola entidad de alcance planetario. Las escenas que transcurren en la nave dan a la novela el ángulo salvífico tan querido por Herbert; los intentos de colonización (militarista) dan la acción y la intriga asimismo tan queridas por Herbert; el varec le da la ración de ensayo de ecologismo planetario que tanto éxito le dio en Dune