El Nomadismo. Vagabundeos Iniciaticos Michel MaffesoliMichel Maffesoli muestra que el nomadismo, entendido generalmente como una forma de vida prehistórica, errante y asociada con lo primitivo y lo inestable, está reapareciendo en numerosas prácticas culturales y experiencias sociales que caracterizan la llamada posmodernidad. En parte, pues vivimos en una temporada que se define por su inestabilidad. undefined. El nomadismo es prehistórico, adecuado, mas ha subsistido en estos convulsos tiempos cuando la globalización y internet dejan errar de un lado a otro, surfiando de sitio en sitio, de cama en la cama, de página en página, de tienda en tienda, de país en país.El libro El Nomadismo. Vagabundeos iniciáticos ( Michel Maffesoli, mil novecientos noventa y siete, FCE – breviarios, dos mil cuatro, expone que la sociedad occidental del siglo veinte aburrió a la gente con sus alegatos sobre “la residencia propia y para siempre” (entiéndase, confinamiento domiciliario), del “individuo ahorrativo y preocupado de su bienestar” (entiéndase, individualismo), de la obediencia a las instituciones del Estado y la confianza en el progreso (entiéndase, civilizado).En suma, la manera de ser del hombre moderno pretendió fundarse en un radical sedentarismo y en un miedo por lo transitorio. Mas cuando esta quietud entró en desuso, afirma el creador, no ha quedado más que el éxodo y la peregrinación. Expresiones de estas 2 últimas se observan hoy en día en la conformación de tribus urbanas en las grandes metrópoli, en la diversificación religiosa, en el merodear muy frecuente por el Internet, en el vagabundear por los centros comerciales, en el callejeo (ya Walter Benjamín lo veía como una queja al encierro y a la producción), en el creciente turismo, en el empleo de drogas (entendidas como éxtasis y vuelos rutinarios), en los deportes de aventura, en la diversidad sexual y por norma general, en todo deSeo o bien acto que implique irse a un “otro lugar” (físico o bien virtual).Para el lector que desee encontrarse con un profundo y bien escrito análisis sociológico de de qué manera el planeta está convirtiendo sus estructuras sociales de la mano con la globalización y las tecnologías de la comunicación internacional, este libro es perfecto. Mas en contraste a otros muchos textos que le dan la razón a la circunstancia política o bien a la inseguridad económica, acá Maffesoli opta por un enfoque novedoso que mismo ha decidido nombrar como una parte de una metafísica sociológica.El nomadismo del que habla Maffesoli está relacionado con el término de ethnoscope creado por Appaduari, el que se refiere a la migración de gente a lo largo y ancho de las etnias y fronteras, presentando el planeta y sus muchas comunidades como móviles y fluidas en lugar de estáticas.Este libro da cuenta de que la vida errante y el nomadismo, en sus diferentes modalidades, son un hecho poco a poco más cierto. Michel Maffesoli advierte en el nomadismo una estructura muy antigua, arquetípica, intemporal. Admira de qué manera, sin perder su lozanía virginal, el nomadismo se actualiza vigorosamente acá y allí por medio de minúsculas manifestaciones. Afirma que se trata de “la encarnación del mito dionisíaco y de la caída de prometeo”; una sed de infinito, un deSeo de evasión, una pulsión migratoria, como conclusión, se trata de una herejía contra todo lo instituido (statuere = aparcar, parar), donde el cuidado de sí, se expresa con los otros y/o en función de un Gran Otro divino.El encierro excesivo de la modernidad ha motivado que la peregrinación, que jamás va a dejar de tener rasgos místicos, efervesca en las psiques de todos. Aun los ateos desean peregrinar, salir, ir en pos de su metayo. Este sociólogo francés comparte con C. G. Jung que hay un inconsciente colectivo que lleva despacio a la sociedad global cara una circulación imparable de valores, fundaciones y formas de ser que van a traer un cambio social tan agradable como traumático, tan redentorio como trágico, paradójico por último como es, afirma el creador, el movimiento de la vida