Una historia de misterio orquestada por personajes pintorescos y ambientada entre los años treinta y la actualidad. Una novela absorbente como solo Kate Morton, autora de El jardín olvidado, sabe hacerlo. Todas y cada una de las familias tienen secretos. Y, para ciertas, basta solo un evento para mudarlo todo. Un pequeño desaparecido... Junio de 1933: en Loanneth, la mansión en el campo de la familia Edevane, todo está limpio y resplandeciente, listo para la tan aguardada celebración de solsticio estival. Alice Edevane, de dieciséis años y escritora en cierne, está singularmente ilusionada. No solo ha encontrado el giro argumental idóneo para su novela, asimismo se ha enamorado absolutamente de quien no debería. Mas para cuando llegue la media noche y los fuegos de artificio alumbren el cielo estival, la familia Edevane va a haber sufrido una pérdida tan grande quetendrá que desamparar Loanneth por siempre... Una casa descuidada. Setenta años más tarde: tras un caso singularmente complicado, Sadie Sparrow, estudiosa en Scotland Yard, está cumpliendo un permiso forzoso en su trabajo. Asilada en casa de su abuelo en Cornualles, pronto verifica que estar ociosa le resulta complicado. Hasta el momento en que un día llega por casualidad a una vieja casa descuidada rodeada de jardines salvajes y espesos bosques y descubre la historia de un niñito desaparecido sin dejar indicio... Un misterio sin solucionar. Mientras, en el ático de una muy elegante casa en Hampstead, la excelente Alice Edevane, ya anciana, lleva una vida tan esmeradamente planeada como las novelas policiacas que escribe. Hasta el momento en que una joven detective comienza a hacer preguntas sobre su pasado familiar en un intento por desenterrar la complicada confusión de secretos de los queAlice ha pasado su vida tratando de escapar