Historias Libros IIV Polibio Polibio (Megápolis, doscientos nueve o bien 208después de ciento dieciocho antes de Cristo) es considerado por la crítica el último gran historiador heleno, en la ruta de Heródoto, Tucídides y Jenofonte, si bien a él le cupo ocuparse no del planeta griego, sino más bien del apogeo de Roma; más en concreto, su obra es un firme y documentado intento de encontrar el acuerdo y el pacto entre la fuerza irrefrenable del Imperio Romano y las cansadas, divididas y decadentes urbes helenísticas del Mediterráneo oriental. Sus Historias son un trabajo monumental en cuarenta libros, de los que se conserva una fracción muy notable aumentada con el rebosante empleo que hacen de él Tito Livio y Apiano. Una parte de la relevancia de las Historias se debe a que narran lo sucedido en un periodo del que carecemos prácticamente de datos, salvo de los que aporta, y además de esto desde la prácticamente contemporaneidad, lo que asegura un conocimiento directo de los hechos. Engloban desde la Primera Guerra Púnica (doscientos sesenta y 4 mil doscientos cuarenta y uno antes de Cristo) entre Roma y Cartago hasta el año ciento cuarenta y seis a. de C., con la destrucción de Corinto y Cartago y el establecimiento de la hegemonía latina sobre toda la ribera mediterránea. Polibio entiende la gran relevancia histórica de este predominio, aumentado con la victoria en el campo helenístico, puesto que se trata de la primera unificación política del Mediterráneo. Ello deja acometer la preparación de una historia universal, el relato de un bastante difícil camino cara el logro de un espacio político común y, conforme el creador, una labor pacificadora y civilizadora. Mas las Historias deben asimismo su perdurable fama a la renovación que realizaron en la disciplina historiográfica. En un periodo acuciado por las guerras y la ansiedad, en que abundaron géneros literarios escapistas y de entretenimiento, la historia se había tornado efectista y trágica, con el acento puesto en batallas y alegatos, anécdotas y chistes sobre personajes históricos. A ello opuso Polibio el estudio serio de las acciones políticas y militares de los pueblos y las urbes por medio de las resoluciones de sus líderes, distinguiendo los hechos estructurales y destacando las causas. Este posicionamiento se refleja asimismo en el estilo literario: Polibio rechaza el lenguaje florido, pomposo, retórico y discursivo que prevalecía en su tiempo, y opta por la sobriedad y la concisión tradicionales que corresponden a su armazón racional. En los primeros 4 libros, que componen este volumen, hay una parte propedéutica sobre la conquista romana de Sicilia y Cerdeña, el robustecimiento del dominio en Italia y el origen del gobierno cartaginés en la península Ibérica, origen del enfrentamiento siguiente, y se narra el comienzo de la Segunda Guerra Púnica o bien Anibálica