En mayo de mil ochocientos sesenta y siete un conjunto de hombres (el coronel Munro, su asistente el sargento MacNeil, el ingeniero Banks, el capitán Hod y el señor Maucler, narrador de la historia) efectúan un viaje por medio de la India en un fabuloso medio de transporte: un vehículo con tracción a vapor acondicionado como vivienda; una especie de predecesor del tanque, mas con forma de elefante. Parten de la ciudad de Calcula hacia Benarés y después al norte para lograr las laderas del Himalaya. El coronel Munro tiene un oponente mortal, Nana Sahib, el único líder de la rebelión de los cipayos que continúa aún con vida, responsable de la muerte de múltiples cientos de mujeres y pequeños, entre los que se halla la propia esposa del coronel, lady Munro. La aventura de esta enemistad y las peripecias del viaje, del que la caza del tigre de bengala es uno de los objetivos principales, forman esta magnífica novela. "Todo cuanto está en los límites de lo posible, ha de ser y va a ser efectuado", afirma en un instante dado el ingeniero Banks. Este espíritu es el que realmente empuja las grandes narraciones de Verne. Esa curiosidad que va anexa a la idea de progreso como esperanza en el futuro. Mas al tiempo, como siempre en sus obras, describe la geografía y las poblaciones, en un caso así del norte de la India, con minuciosidad y nos presenta un abanico de héroes y situaciones que dotan al texto de la particularidad de ser desbordantemente animoso, entretenido, aun jovial; si bien los odios sean a muerte; las escenas de acción, trepidantes; los traidores, auténticos traidores; y las escabechinas, torrentes de sangre. Para resumir que, si bien poco famosa, resulta ser un auténtico regalo para los amantes de la narración tradicional