El baño de sangre desencadenado por Nil Spaar, el inexorable virrey de la Liga de Duskhan, ha puesto a la Nueva República en una situación insostenible. Leia, atrapada entre la obligación de proteger sus convicciones y la necesidad de respetar el funcionamiento de los frágiles engranajes políticos del Senado, había decidido contestar al reto con la fuerza militar y, por último, había reaccionado enérgicamente mandando a Han al Cúmulo de Koornacht a fin de que se pusiese al frente de la fuerza expedicionaria liderada por el general A"baht. Mas la impalcable detención de la lanzadera a bordo de la que viajaba Han llevada a cabo por un conjunto de ataque yevethano, ha tolerado que la liga de Duskhan cuente con una nueva carta para jugar. Nil Spaar, enfurecido frente a la terquedad de que dan muestra esas fieras que osan retar el orden divino del Todo que entregó las estrellas a los Benditos, comienza una espantosa escalada de amenazas que pretende obligar a Leia a retirar sus naves. Ackbar, Leia, Drayson y sus altos oficiales deberán contemplar, aterrados, de qué forma un virrey enloquecido por la sed de sangre golpea a lo largo de una eternidad de sufrimiento a un Han indefenso hasta dejarlo transformado en un guiñapo humano, y de qué manera concluye su mudo mensaje de violencia con una seca conminación a fin de que abandonen Koornacht. Nil Spaar cree comprender a las criaturas a las que los yevethanos llaman fieras, mas no sabe que ha cometido un fallo fatal. Los héroes de la Nueva República ya han peligroso sus vidas y las de sus seres queridos muchas veces para proteger los ideales de la paz y la justicia, y lo que hubiera debido ser un callejón sin salida se transforma en el estímulo que Leia precisaba para recuperar la lucidez. Ella, que siempre y en todo momento había sabido trazar los mapas de la acción con líneas lo más rectas posible, volverá a hacerlo y demandará los poderes de urgencia de la Carta de la Nueva República para machacar de una vez por siempre la temible amenaza yevethana. Mas al hacerlo, Leia asimismo sabe cuál es el destino al que apunta esa nueva línea recta que termina de trazar, y sabe que al final de ella solo hallará la muerte de Han, el padre de sus hijos y el hombre al que ha unido su vida. La maquinaria militar se pone en marcha y avanza cara la ineludible confrontación final. La liga de Duskhan es un contrincante poderoso que luchará hasta el exterminio, y las batallas que están a puntito de librarse se van a cobrar un coste descomunal en vidas, salvo que los 2 hilos de obscuridad ocultos en la trama de esta horrible crisis sean capaces de evitarlo. Pues mientras que se aproxima la hora final, Lando, Lobot y sus fieles Cetrespeó y Erredós prosiguen combatiendo para descifrar el misterio del Indigente, y Luke, al otro extremo de la galaxia, se encara al misterio de los fallanassis y descubre que sus enormes poderes tal vez puedan eludir la catástrofe de la guerra