"Los Hechiceros Charlan" es una obra fundamentalmente práctica, que muestra al individuo la auténtica entrada al camino de la sabiduría. Una estrofa bíblica de alto contenido esotérico dice: "Entrad por la puerta angosta pues ancha es la puerta y espacioso el camino que lleva a la perdición, y son muchos los que entran por ella". "Muchos van a ser los llamados y pocos los escogidos". El estudiante de esoterismo perdido en el laberinto de múltiples corrientes de pensamiento, puede localizar en este libro el hilo de Ariadna que lo lleve cara la meta deseada. Madame Blavatsky, en su libro "Ocultismo Práctico", anota la gran diferencia existente entre las ciencias ocultas, el ocultismo teorético o bien teosofía y el ocultismo práctico. Afirma en ciertas de sus partes: "... es muy simple ser teósofo..." "... mas muy diferente es entrar en el camino en que al hombre le resulta posible hacer cuanto bien quiere sin siquiera en ocasiones levantar en apariencia un dedo de la mano..." "... el ocultismo difiere de la magia y demás ciencias ocultas como el esplendente sol difiere de un candil...". "Los Hechiceros Charlan" alumbra ese camino tan ignoto, malinterpretado y mistificado que es el ocultismo, única ruta que deja al individuo desposarse con Isis, señora de los misterios de la naturaleza. John Baines, directivo del Instituto Filosófico Hermético, concibió esta obra a fin de que el novato vislumbre el camino de la verdad y del conocimiento de los misterios de la naturaleza y entienda (si tiene ojos para poder ver y oídos para oír) el auténtico y elevado sitial que ocupa el ocultismo como una ciencia divina legada al hombre en una temporada recóndita por visitantes extraterrestres excepcionalmente evolucionados. Esta ciencia esencial forma la base y requisito anterior para un perfecto conocimiento de lo real por la parte del hombre. Aguardamos que este trabajo sea una luz que contribuya a desvanecer las tinieblas del materialismo, la desorientación y la duda