Esta novela narra una historia real. Sucedió en dos mil once. La vivió Irina Lucidi. Esta novela aborda un dolor para el que muchos idiomas no tienen una palabra: "La palabra que falta. El progenitor que pierde a un hijo. No que lo mata: que lo pierde. ¿De qué forma lleva por nombre, de qué forma se afirma, quién es aquel a quien se le está muerto un hijo? ¿Qué sitio ocupa en la historia? Falta la palabra, falta la palabra. Falta, ausencia. ¿Quién la ha borrado?, ¿en qué momento?, del diccionario italiano, francés, alemán, de España, inglés. Y, además de esto, ¿por qué razón?"Irina es una mujer de padre italiano y madre alemana, criada en Bélgica y educada en escuelas italianas, letrada, con experiencia laboral en U.S.A., Francia y después en Suiza, donde se casó con Mathias, un suizo alemán que trabajaba en exactamente la misma multinacional que . Tuvieron 2 hijas gemelas, Alessia y Livia, y se apartaron. En el primer mes del año de dos mil once el padre se llevó a las pequeñas, que entonces tenían 6 años, aparentemente para pasar unas vacaciones con ellas. Se suicidó en las vías ferroviarias en Italia y dejó una nota a su ex- mujer en la que le afirmaba que las pequeñas no habían sufrido y que no las volvería a ver.La novela narra la historia de ese desgarro, de ese dolor. La historia de una madre que busca a sus hijas y encuentra con la burocracia, con la indiferencia, con la desidia, con el olvido. La historia de una madre que debe aprender a vivir con esa ausencia. La historia de una madre que debe aprender a superar la pérdida, a cerrar la herida, a mirar cara delante, a descubrir que "fuera es primavera".Partiendo de un hecho de la crónica de acontencimientos y dando voz a la madre débil, Concita De Gregorio ha escrito un libro sobre el absurdo, sobre lo aterrador, sobre lo innombrable. Una novela que se adentra en el territorio dudoso del sufrimiento y recorre el duro recorrido preciso para superarlo, para salir adelante. Huyendo del sentimentalismo simple y del sensacionalismo asequible, la autora crea una novela breve, valiente, intensa, sobrecogedo