Una vida sana. Desarrollo personal y laboral Encargarse de la salud y adquirir hábitos saludables puede motivarnos a lograr un nuevo modo de vida sano y además de esto ser la primordial herramienta para ganarle la partida a las en­fermedades. La nutrición se ha transformado en nuestro primordial aliado para lograr una vida sana y saludable. El presente folleto pretende transformarse en un aliado más en la busca de elementos que nos dejen conseguir una mejor calidad de vida, esto debido a la poderosa repercusión que ejercitan los hábitos y las costumbres de día a día, como, la nutrición, el trabajo o bien la utilización del tiempo libre en nuestra salud. Nutrición, aire puro, agua, sol, ejercicio, reposo, abstinencia de tóxicos y buena dispo­sición mental, todos forman en conjunto, un excelente programa de vida sana. Practicar­los con entusiasmo hace nuestra vida diaria más simple y saludable. Factores definitivos para una vida sana Nutrición La nutrición es el hábito que más influye en nuestra salud. No solo el tiempo de comida sino más bien asimismo el mo­mento y la manera de tomarla, afectan de forma decidida nuestro organismo. Aire puro Sin respiración no podemos vivir más de 2 o bien 3 minutos. El oxígeno contenido en el ai­re es indispensable a fin de que los comestibles se quemen en nuestras células y generen la energía precisa para la vida. Agua Precisamos agua por fuera (para la higiene anatómico) y agua por dentro; claro está que un sesenta por ciento de nuestro cuerpo es sencillamente agua. Procure tomar día a día cuando menos 6 vasos de agua entre las comidas (en verano más). Tome 2 vasos de agua en ayunas, intentando que no esté fría. Eso va a limpiar su estómago de la mucosidad que se genera a lo largo de la noche. Los riñones precisan agua para poder filtrar la sangre y suprimir las substancias de desecho con la orina; nuestro aparato digestible precisa agua a fin de que las heces no sean demasia­do secas y duras, y se genere estreñimiento; la piel precisa agua para preservarse lisa y sana; y hasta los huesos deben contener una conveniente proporción de agua para mante­ner su elasticidad y dureza. Sol Donde entra el sol hay vida y salud. La luz solar resulta indispensable para la vida y la conservación de la salud. Gracias a ella se genera en la piel la vitamina liposoluble de tipo D. La radiación ultravioleta de la luz solar actúa como desinfectante, capaz de destruir nume­rosos gérmenes patógenos. Se ha comprobado que en temporadas de invierno, cuando se pasan días enteros sin ver el sol, aumenta la frecuencia de las depresiones inquietas en el humano