De qué manera subsistir a una pérdida El humano desde pequeño debe enfrentarse a diferentes situaciones en la vida que por su naturaleza, nos preparan para abandonar a diferentes experiencias que nos dejan desarrollarnos y transformarnos en seres más independientes. Durante estas experiencias nos damos cuenta que cada una de ellas sig­nifica una pérdida o bien una ganancia. Por norma general a todos nos preparan para ganar, ser triunfantes y hay pocos ganadores, lo que prueba que tarde o bien tem­prano debemos encararnos a una pérdida. En el presente folleto no nos planteamos darle una receta a fin de que pueda eliminar o bien eludir el dolor de una pérdida cariñosa, sino más bien, que conoz­ca por qué razón en ocasiones duele tanto perder algo o bien alguien que se quiere, por qué razón ciertas personas padecen más que otras y cuáles son las etapas que debemos pasar para cicatrizar las heridas sensibles. Lo más esencial al final de esta lectura es que pueda caer en la cuenta, de qué forma a cada experiencia de pérdida en la vida le toca una experiencia de ganancia y a la inversa. ¿Qué es una pérdida? Son experiencias universales (pues absolutamente nadie está exento de ellas), dolorosas, mas precisas para poder medrar emotivamente. Géneros de pérdidas Las pérdidas pueden ser de diferentes tipos: por poner un ejemplo físicas; por accidente o bien por una cirugía (perder una extremidad o bien un órgano). Además se puede perder a un ser querido, o bien una mascota, así sea pues murió o bien pues se fue. Se puede tener pérdidas sociales, por ejemplo: pérdida del estatus económi­co, pérdida de poder en una organización a la que se pertenece, entre otras muchas. Es esencial observar las pérdidas desde una perspectiva extensa. En la natu­raleza las pérdidas son un factor esencial en la creación: la planta germina y la semilla se pierde, el día comienza y la noche se marcha. En todos y cada uno de los casos las pérdidas dan sitio al desarrollo. De igual forma en la existencia humana. Es bastante difícil mirar cara los triunfos que hemos logrado en la vida sin descubrir alguna pérdida unida a ellos. Teniendo esta verdad muy presente examinemos las diferentes pérdidas que se pueden padecer durante la vida: Pérdidas obvias: La muerte de una persona querida La rotura de una relación La separación El divorcio Pérdidas no tan obvias: De empleo De dinero De salud De casa Cambios (de maestros, escuela…) De posesiones (por hurto) De éxitos (fama, poder.) De un ideal De una meta